La Dracaena sanderiana, comúnmente conocida como bambú de la suerte (aunque no es un bambú verdadero), es una planta de interior muy popular por su elegancia y facilidad de cuidado. Su aspecto exótico y su capacidad para crecer en agua la convierten en una opción ideal para decorar cualquier espacio.

Características Distintivas:

  • Tallos: Sus tallos son delgados y flexibles, similares a cañas, y pueden crecer erectos o ligeramente curvados.
  • Hojas: Las hojas son alargadas y lanceoladas, de un verde intenso con rayas amarillas o blancas, dependiendo de la variedad.
     
  • Tamaño: Puede alcanzar alturas considerables, pero su crecimiento es relativamente lento.

Cuidados Esenciales:

  • Luz: Prefiere la luz indirecta brillante, pero puede tolerar zonas con poca luz. Evita la luz solar directa, ya que puede quemar sus hojas.
  • Agua: Puede cultivarse tanto en agua como en tierra. Si la cultivas en agua, cambia el agua cada 2-3 semanas y asegúrate de que las raíces estén sumergidas. Si la cultivas en tierra, riega cuando la capa superior del sustrato esté seca.
  • Sustrato: Si la cultivas en tierra, utiliza un sustrato bien drenado y rico en materia orgánica.
  • Temperatura: Prefiere temperaturas cálidas, entre 18 y 24°C. Evita las corrientes de aire frío.
  • Humedad: Le gusta un ambiente húmedo. Puedes aumentar la humedad ambiental pulverizando sus hojas regularmente.