Hiedra: Una trepadora elegante y adaptable
La hiedra, científicamente conocida como Hedera, es un género de plantas perennes, leñosas y trepadoras. Se caracteriza por sus hojas perennes, de formas variadas y colores intensos, y su capacidad para adherirse a diferentes superficies gracias a sus raíces aéreas.
Características:
- Hojas: Las hojas de la hiedra pueden ser lobuladas o enteras, de color verde oscuro, variegado o incluso dorado, dependiendo de la variedad.
- Tallo: Es leñoso y flexible, lo que le permite trepar por paredes, rocas o cualquier otra superficie.
- Raíces aéreas: Estas raíces le permiten adherirse firmemente a los soportes y crecer en vertical.
- Flores: Las flores son pequeñas y poco llamativas, de color amarillo verdoso, y aparecen en otoño.
- Frutos: Produce bayas pequeñas y redondas de color negro azulado, pero son tóxicas para el consumo humano.
Cuidados:
- Luz: La hiedra se adapta a diferentes condiciones de luz, desde sombra parcial hasta sol directo, aunque prefiere lugares luminosos.
- Riego: El riego debe ser moderado, evitando encharcamientos.
- Temperatura: Tolera una amplia gama de temperaturas, pero prefiere un clima templado.
- Sustrato: Utiliza un sustrato rico en materia orgánica y bien drenado.
- Poda: La poda regular ayuda a controlar su crecimiento y mantenerla en forma