Lirio: Una flor clásica y elegante
Los lirios son plantas perennes que producen flores grandes y vistosas en una variedad de colores, desde blancos puros hasta tonos vibrantes como el rosa, naranja, rojo y amarillo. Su forma trompeta y su aroma dulce los convierten en una flor muy popular.
Características generales:
- Bulbos: Son la parte subterránea de la planta que almacena nutrientes y produce nuevos tallos y hojas cada año.
- Tallos: Los tallos son erectos y pueden alcanzar alturas considerables, dependiendo de la variedad.
- Hojas: Las hojas son largas y lanceoladas, de un color verde brillante.
- Flores: Las flores son grandes y vistosas, con seis pétalos que se unen en la base para formar una trompeta.
Cuidados básicos:
- Luz: Los lirios necesitan al menos 6 horas de luz solar directa al día para florecer abundantemente.
- Suelo: Prefieren suelos ricos en materia orgánica, bien drenados y ligeramente ácidos.
- Riego: El riego debe ser regular, especialmente durante los períodos de floración. Evita encharcar el suelo, ya que los bulbos pueden pudrirse.
- Plantación: Los bulbos se plantan en otoño o primavera, a una profundidad de aproximadamente el doble de su altura.
- Fertilización: Aplica un fertilizante balanceado cada 4-6 semanas durante la temporada de crecimiento.
- Poda: Retira las flores marchitas y las hojas amarillas para fomentar una nueva floración.